En árabe, hummus significa simplemente “garbanzo”, pero también es el nombre de un plato muy popular en Oriente Medio. El hummus es muy nutritivo (fibra, proteínas y minerales) y energético (hidrato de carbono de absorción lenta).
Aunque de origen muy humilde, en la actualidad es una receta moderna y muy valorada en las cocinas vegetarianas y veganas.
Es una forma diferente, más lúdica e informal de tomar legumbres y muy adecuada para seducir a los niños o a los adultos reticentes a ellas. Si no que se lo pregunten a mi hijo mayor (no le gusta los garbanzos) y después de comerse una buenas rebanadas de pan de pita con el hummus le dije de que estaba hecho...imaginad la cara que puso...
Ingredientes:
125 gr de garbanzos cocidos
3 cucharaditas de tahini (pasta de sésamo, también llamada tahina o tahín)
2 dientes de ajo
Zumo de medio limón
1 cucharadita de pimentón
Aceite de oliva
Sal
Preparación:
- Colocar los garbanzos cocidos en el vaso de la batidora, apartando algunos para adornar
- Añadir el tahini, los ajos picados, el zumo de limón y la sal y triturar, si es precioso se puede añadir un poco de agua, según como os guste la textura, debe quedar cremoso y consistente
- Rectificar de sal
- Servir en una fuente o cuencos, adornar con los garbanzos enteros que habíamos reservado
- Regar con un hilo de aceite de oliva
- Espolvorear por encima con el pimentón dulce
- Acompañar con pan normal o, mejor aún, con pan de pita